¿Buscas una forma sencilla y sabrosa de preparar pollo? Una receta crujiente y deliciosa de milanesa de pollo podría ser el plato perfecto para ti. Este plato es una forma estupenda de dar sabor a tu cena y es muy fácil de preparar. En este artículo, cubriremos los ingredientes básicos y los pasos para hacer una milanesa de pollo increíble, así como algunos consejos para servirla y añadir algunas variaciones sabrosas.
Paso 1: Reúne los ingredientes
El primer paso para preparar una deliciosa milanesa de pollo es reunir todos los ingredientes. Necesitarás lo siguiente:
- 4 pechugas de pollo deshuesadas y sin piel
- 1 1/2 tazas de harina de todo uso
- 2 huevos grandes
- 1 taza de leche
- 1 taza de migas de pan
- 1/2 taza de queso parmesano rallado
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de pimienta negra
Paso 2: Prepara el pollo
El siguiente paso que debes dar para preparar una milanesa de pollo es preparar el pollo. Empieza por quitar cualquier exceso de grasa de las pechugas y córtalas por la mitad longitudinalmente, para que te queden 8 filetes más finos. A continuación, golpea cada filete con un ablandador de carne para ablandarlos ligeramente y que tengan un grosor uniforme.
Paso 3: Mezcla y prepara los ingredientes húmedos y secos
El siguiente paso para preparar la milanesa de pollo es mezclar y preparar los ingredientes húmedos y secos. En un cuenco mediano, mezcla la harina de todo uso, la sal y la pimienta negra. En otro recipiente, bate los huevos y la leche. En otro cuenco mediano, mezcla las migas de pan y el queso parmesano rallado.
Paso 4: Cubre el pollo con el rebozado
Ahora es el momento de rebozar las pechugas de pollo. Coge cada una de las pechugas de pollo y pásalas por la mezcla de harina, asegurándote de sacudir el exceso. A continuación, sumerge cada filete de pollo en la mezcla de huevo y leche, asegurándote de que queden bien cubiertos por ambos lados. Por último, sumerge las pechugas de pollo en la mezcla de pan rallado y queso Parmesano, presionando ligeramente para que el rebozado se adhiera al pollo.
Paso 5: Fríe las pechugas de pollo
El último paso para preparar la milanesa de pollo es freírlas a la perfección. En una sartén grande y antiadherente, calienta 2 cucharadas de aceite de oliva a fuego medio-alto. Cuando el aceite esté caliente, añade las pechugas de pollo y cocina 3-4 minutos por cada lado, hasta que estén doradas y el pollo esté bien cocido. Utiliza un termómetro de cocina para comprobar la temperatura interna del pollo, que debe ser de 165°F.
Variaciones y sugerencias para servir
Una vez que hayas preparado la milanesa de pollo, puedes añadirle más sabor sirviéndola con una guarnición de salsa, guacamole o salsa chimichurri. También puedes colocar los filetes de pollo sobre una cama de hojas de ensalada para una comida ligera y sana. Y si quieres algo más caprichoso, prueba a añadir un puré de patatas, una polenta cremosa o incluso macarrones con queso.
Conclusión
Preparar una milanesa de pollo deliciosa y crujiente es una forma sencilla y fácil de dar sabor a tu cena. Utilizando ingredientes básicos y dando unos sencillos pasos, puedes tener un plato sabroso listo en muy poco tiempo. Además, con la adición de algunas variaciones sabrosas, puedes personalizar fácilmente tus milanesas de pollo para que se adapten a tus gustos. Así que la próxima vez que busques una forma sencilla y deliciosa de preparar pollo, no dejes de probar la milanesa de pollo.