La pechuga de pollo es, sin duda, uno de los ingredientes más versátiles de la cocina. Puede cocinarse de multitud de formas diferentes, desde asarla y cubrirla con una sabrosa salsa, hasta adobarla y echarla a la barbacoa. Si buscas recetas deliciosas, creativas y sanas con pechuga de pollo que probar en la cocina, ¡has venido al lugar correcto! Estos platos sin duda impresionarán a tu familia y amigos por su sabor y presentación.
Pollo con limón y hierbas
Los sabores de esta receta son alegres, frescos y picantes. Comienza deshuesando las pechugas de pollo, es decir, abriéndolas por la mitad horizontalmente, pero sin llegar a cortarlas del todo. Una vez que el pollo esté en forma de mariposa, sazónalo con sal y pimienta, y espolvorea encima una mezcla de perejil recién picado, tomillo y ralladura de limón. Puede servirse con rodajas de limón fresco para que la presentación sea aún más impresionante.
Un plato principal con pechugas de pollo que se encuentran en nuestra lista de deliciosas recetas.
Pollo Alfredo
Esta receta indulgente es perfecta para una noche acogedora en casa. Comienza hirviendo fettuccine o tu pasta favorita. Cuece las pechugas de pollo cortadas en daditos en una sartén hasta que estén doradas por todos los lados. Cuando estén bien cocidas, añade nata, ajo, queso parmesano rallado y mantequilla. Mezcla todo bien, añade los fettuccine y remueve hasta que todo esté bien mezclado. ¡Esta pasta cremosa hará que tu familia repita!
Pollo relleno
Esta receta es un poco más compleja, pero el resultado final merece el esfuerzo. Empieza por golpear ligeramente las pechugas de pollo para que tengan un grosor uniforme y se cocinen por igual. Cuando el pollo esté listo, rellénalo con verduras finamente cortadas, queso y cualquier otro ingrediente que prefieras. Envuelve cada pechuga de pollo rellena con un par de lonchas de beicon para que el relleno quede bien sujeto, y hornéalas a 190°C durante 25-30 minutos, o hasta que el beicon esté bien cocinado.
Este plato seguro que impresiona a tus invitados.
Pollo al Chili con Quinoa
Una variante del clásico chili, esta receta es a la vez sana y deliciosa. Empieza picando pimiento rojo, amarillo y verde. Cubre el fondo de una sartén con un poco de aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio-alto. Añade los pimientos, la cebolla y el ajo, y cocina unos minutos hasta que estén blandos. Agrega un bote de tomates troceados, otro de alubias negras, la quinoa cocida, pechuga de pollo cocida picada y el chile. Cocina hasta que todo esté bien caliente, retira del fuego y añade una taza de queso cheddar rallado.
Pollo con Sésamo
Este plato de inspiración asiática es una forma sencilla de dar un toque de elegancia a tus cenas entre semana. Empieza mezclando salsa de soja, vinagre de arroz, aceite de sésamo, miel y jengibre y ajo picados. Vierte esto sobre el pollo y déjalo marinar durante al menos una hora. Una vez que el pollo haya marinado, doralo en la sartén en una sartén grande, y luego añade el adobo para crear un glaseado pegajoso y dulce. Sírvelo con un buen plato de verduras salteadas para una comida completa.
Independientemente de la receta que elijas, tu familia quedará impresionada con los sabores y la presentación de estos platos. El pollo es un ingrediente versátil que puede combinarse fácilmente con multitud de sabores diferentes, así que siéntete libre de dar rienda suelta a tu creatividad mientras experimentas en la cocina.
