La sopa de pollo es un plato clásico y reconfortante que se ha disfrutado durante generaciones. Tanto si no se encuentra bien como si sólo necesita un incentivo caliente, esta nutritiva y deliciosa sopa sin duda le deleitará. Esta fácil receta casera de sopa de pollo es una visita obligada para quienes buscan añadir un poco de calor a su cocina. Siga leyendo para aprender a preparar esta clásica comida reconfortante.
Ingredientes para la sopa de pollo casera
Esta receta de sopa de pollo casera sólo requiere unos pocos ingredientes básicos y se prepara rápidamente. Los ingredientes principales son pechugas de pollo deshuesadas y sin piel, cebollas, zanahorias, apio, ajo, caldo de pollo, sal y pimienta. Añada otras verduras, como patatas o judías verdes, para crear una deliciosa variedad de sabores.
Cómo preparar sopa de pollo casera
Empiece por calentar una olla grande a fuego medio. Añada las pechugas de pollo a la olla, junto con las cebollas, zanahorias y apio cortados en dados. Cocine durante unos minutos, removiendo de vez en cuando, hasta que las cebollas estén translúcidas y las verduras empiecen a ablandarse. Añada el ajo y cocine durante un minuto más.
Una vez que las verduras estén ablandadas, añada el caldo de pollo a la olla. Lleve el caldo a ebullición y luego reduzca el fuego a bajo, dejando que la sopa hierva a fuego lento durante unos 20 minutos. Desespume cualquier espuma que suba a la superficie.
Una vez que el caldo haya cocido a fuego lento, retire las pechugas de pollo y desmíguelas con dos tenedores. Vuelva a colocar el pollo desmenuzado en la olla y remueva para mezclarlo. Sazone la sopa con sal y pimienta al gusto.
Servir y guardar la sopa de pollo casera
Sirva la sopa de pollo casera en cuencos, adornada con perejil fresco picado o cebollino. Esta sopa se congela bien, así que puede hacer una gran cantidad y guardarla en el congelador para más tarde. Sólo tiene que transferir la sopa a un recipiente hermético y congelarla hasta 6 meses.
Los beneficios para la salud de la sopa de pollo casera
La sopa de pollo se conoce a menudo como «penicilina judía» por sus propiedades curativas. El caldo suave es fácil de digerir, por lo que es una opción ideal para quienes se encuentran mal. El pollo y las verduras aportan nutrientes y vitaminas esenciales, mientras que las hierbas aromáticas y las especias ayudan a despejar los senos nasales y calmar el estómago.
En Conclusión
Esta fácil receta casera de sopa de pollo es una forma deliciosa y reconfortante de calentar su cocina. Con sólo unos pocos ingredientes básicos, esta clásica comida reconfortante se prepara rápidamente y es perfecta para una comida reconfortante o para ayudar a su cuerpo a reponerse de los nutrientes esenciales. Así que anímate a probarla, porque estamos seguros de que no te decepcionará.