Hace ya bastante tiempo que veganos y personas con intolerancia a la lactosa recurren al queso de anacardos como delicioso y sano sustituto de los lácteos. Este sabroso queso no sólo es estupendo para cocinar, sino que también está repleto de beneficios nutricionales. Veamos más de cerca en qué consiste este producto único, cómo se elabora y qué ventajas ofrece.
¿Qué es el queso de anacardos?
El queso de anacardo -también conocido como queso de anacardo, del español- es un queso no lácteo elaborado con anacardos crudos. En cuanto al sabor, se sabe que es cremoso y ácido, y puede utilizarse en lugar del queso normal en muchas recetas.
¿Cómo se hace el queso de anacardo?
Para hacer queso de anacardo, primero se ponen a remojo anacardos crudos -que en realidad son semillas- en agua. Esto ayuda a ablandar los anacardos y a facilitar su mezcla. Una vez remojados, se trituran en un robot de cocina o batidora, junto con una variedad de especias, zumo de limón y un tipo de polvo probiótico. El resultado es un queso cremoso y ácido de anacardos que es perfecto tanto para mojar como para untar.
¿Cuáles son los beneficios del queso de anacardo?
El queso de anacardos aporta la misma cantidad de proteínas que el queso normal, y contiene altos niveles de la grasa buena que tu cuerpo necesita para funcionar correctamente. También está cargado de vitaminas y minerales, como calcio, potasio, magnesio y vitamina E. Además, el queso de anacardo es bajo en sodio, lo que lo convierte en una opción excelente para quienes deben vigilar su consumo de sal.
¿Cómo se utiliza el queso de anacardo?
Una de las grandes ventajas del queso de anacardo es que puede utilizarse en una gran variedad de recetas. Se puede untar en galletas saladas y bocadillos, o utilizarlo como salsa para mojar verduras o patatas fritas. También puede utilizarse en lugar del queso normal en pasta, ensaladas y sopas. De hecho, cualquier receta que lleve queso puede adaptarse para utilizar queso de anacardos en su lugar.
Conclusión
El queso de anacardo es un delicioso y sano sustituto no lácteo del queso normal. Se elabora con anacardos crudos y una variedad de especias, zumo de limón y polvo probiótico. El queso de anacardos está cargado de beneficios nutricionales, como proteínas, grasas buenas, vitaminas y minerales. Por último, puede utilizarse en una variedad de recetas, lo que lo hace perfecto tanto para cocinar como para picotear. Así que, ¿por qué no pruebas el queso de anacardos y descubres un nuevo mundo de sabores salados?